Cuando corre, cualquiera puede verlo volar. Sus zapatillas levitan sobre el asfalto, casi no lo tocan el tiempo suficiente para que quede su huella. Jesús Brenes Gómez, más conocido por ‘Motita’, ha dado sentido al atletismo en Arahal. Tiene tantos premios, tantos trofeos y reconocimientos, entre ellos el Undécimo Campeonato España Absoluto 3000 en Pista Cubierta, que podría llenar solo un museo.

Su zancada marca el paso en cada carrera que participa. Si le hubiera dado por jugar al fútbol, ahora tendría cientos de miles de seguidores, pero escogió un deporte menos reconocido por la sociedad y más duro. Vive solo los entrenamientos, las lesiones, las dificultades para encontrar espónsor. Y por mucho que se esfuerce, consiga lo que consiga, sabe que así será siempre. Y ese es su principal mérito porque para seguir sólo le hace falta estar en buenas condiciones físicas, nada más.

Cada gota de sudor, cada dolor muscular, cada falta de aliento, lo empuja a superar sus propias marcas. La meta es hacer del atletismo un deporte de los grandes. Ya casi lo consigue con la inestimable ayuda de otros compañeros de Arahal y de toda Andalucía. Los caminos del entorno están llenos de atletas que lo tienen como referencia.

Con este sentido de la honestidad hacia él mismo, Jesús se quita a primera hora de la mañana las zapatillas, después del primer entrenamiento del día, para ponerse las botas de trabajo del área de Obras municipal en Arahal. Y puedes encontrarlo abriendo una zanja para poner una farola, un semáforo o cargando y descargando camiones. En su mente da vueltas la forma de enfocar la próxima carrera, qué músculo tiene hoy más cargado, cuántos kilómetros debe hacer en el próximo entrenamiento. Forma parte de una familia de artistas y corredores que nunca han pasado desapercibidos. Jesús eligió este camino de vida porque era el único preparado para volar.